Odontología Láser se supone que es el futuro sin dolor, sin ruidos debemos vivir ya. Entonces ¿por qué no?
La palabra “láser” es en realidad un acrónimo que significa amplificación de luz por emisión estimulada de radiación. Es importante comprender que los láseres tienen algunas propiedades únicas que los hacen tan versátil y prestan un enorme potencial para su uso en el campo médico. Toda la luz que es emitida por el láser es una sola fase, una sola longitud de onda y no divergentes en la naturaleza. Eso significa que la luz se puede centrar en un área muy pequeña, sin dañar cualquier otra estructura vital cercana. La caries dental es muy común en todo el mundo. De hecho, es difícil encontrar personas que nunca han tenido una cavidad llena o cualquier tipo de caries dental en sus vidas. La forma tradicional de eliminación de material de diente cariado implica el uso de instrumentos mecánicos cuyo uso está acompañado de una gran cantidad de ruido, de agua y de vibración al diente. La desventaja, sin embargo, es el hecho de que los dentistas no tienen ninguna retroalimentación táctil mientras se prepara la cavidad y que no están seguros en cuanto a la profundidad de penetración de los rayos láser. El tratamiento de conducto es una de las áreas que tienen la mayor promesa para el uso del láser en odontología. Un canal de la raíz implica la localización de todos los canales presentes en el diente, darles forma y la ampliación de ellos, desinfectarlas y, finalmente, llenarlas con un material biocompatible. Los láseres pueden ayudar en la formación y la ampliación de paso, pero como se mencionó anteriormente, viajan en línea recta, mientras que un tratamiento de conducto es casi siempre curvada en al menos dos dimensiones. Ésto significa que su uso se limita a un grupo selecto de las circunstancias. Desinfección de los conductos radiculares es otra cosa, sin embargo. Varios estudios han encontrado que los desinfectantes que se activan a través de los láseres son muy eficaces. Otra técnica que implica el uso de ondas acústicas siendo producido por el láser para desinfectar los canales, conocidos como terapia fotodinámica, también ha mostrado resultados muy alentadores en los estudios. La única cosa que a los dentistas preocupa es el aumento de temperatura que tiene lugar con el uso de láseres. Ésto puede ser extremadamente perjudicial para el diente que se está tratando, así como los ligamentos que rodean y las fibras gingivales. Se han hecho avances para incorporar el uso de láseres de baja energía que no causan un aumento de la temperatura. Una vez más la propiedad inherente de rayos láser para dejar atrás un campo estéril es muy deseable en la desinfección de los conductos radiculares. El uso de láseres como un método para ayudar en la desinfección de las superficies de la raíz y la ayuda en la eliminación de las bolsas en ambas circunstancias quirúrgicos y no quirúrgicos también han sido investigados. Aunque se encontraron que los láseres podrían ser eficaz en la desinfección de superficies de la raíz limpias, que no eran muy eficaces en la eliminación en realidad del sarro y de tejidos enfermos. Ninguna de las cosas logradas mediante el uso del láser en el tratamiento de las encías eran cosas que no podían ser alcanzados a través de los métodos tradicionales. Una gran cantidad de dentistas encontró que este cambio se aboga por el bien de cambio en lugar de tener cualquier valor demostrable. Otra gran ventaja de los láseres, además de ser silencioso y sin vibraciones es que permiten un campo sin sangre de la cirugía. El calor producido por el láser ayuda a sellar los vasos sanguíneos, ya que están siendo cortados, controlando de este modo el sangrado automáticamente. Algunos pacientes asumen que los láseres darán lugar a menos dolor que los métodos tradicionales de la cirugía, aunque la evidencia ha encontrado que ésto puede ser anecdótico en el mejor de los casos. Ciertos estudios han encontrado sin embargo que la curación que tiene lugar después de un procedimiento realizado con el láser es más rápido y con menos compl